V DE VALENTÍN

Vada, tras una muy buena acción previa de Francés y Azón, dio el triunfo al Real Zaragoza -se acuesta décimo- en su cierre de curso en casa. Lasure debutó y dejó una gran impresión. La Romareda despidió a JIM con cariño

🐾 Javier Hernández (@SepiaHdez)

📷 Alfonso Reyes (@Futbolgrafo)

Queda extinguido el último incendio de la temporada, declarado tras la sonrojante derrota contra el Alcorcón y ya muy sofocado gracias a la muy buena imagen dada en Oviedo el lunes. Se corría el riesgo de que pudiera reactivarse -derrota mediante- en este último partido del curso en La Romareda. No fue así. No se jugó tan bien, especialmente en una primera parte donde el Lugo rondó el gol en varios pasajes, pero el equipo mejoró en la segunda con la vitamina que siempre supone el ingreso de Azón, se consolidó a partir de la roja a Xavi Torres y encontró el triunfo con esa puntualidad que caracteriza a Vada para llegar en el momento exacto desde segunda línea. Triunfo para dormir décimos, aspirar a la novena plaza -si el Cartagena no gana este fin de semana al Amorebieta-, cerrar la casa hasta agosto sin dar más portazos y dedicarle una despedida dulce al inolvidable -si todavía nos late algo el corazón- JIM.

Por encima de cualquiera, el protagonista principal fue Dani Lasure. Desde que se activó su ficha en enero, JIM -muy aplaudido por la grada antes de comenzar el encuentro- no había encontrado el momento de hacerle debutar -esta temporada, claro-. Ayer quiso tener el detalle y Lasu tuvo otro con todos nosotros: demostrarnos que está mucho mejor de lo sospechado y que le sobra fútbol para integrar la próxima plantilla del Real Zaragoza. ¡Qué disparo le sacó Whalley y qué facilidad para enroscar centros desde la banda izquierda! Ojalá Sanllehí, ayer acompañado por Chris Henderson -director deportivo del Inter Miami y por el saliente Yarza, haya tomado nota. Por cierto, Henderson -una- ya ha estado en el palco esta temporada la mitad de veces que el todavía accionista no tan minoritario. Y Sanllehí, aterrizado a principios de abril como futuro director general, lo ha hecho tantas veces como los otros dos juntos; al fin vivió su primera victoria en directo, tras el empate ante el Burgos y la derrota con el Alcorcón.

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JIM nos volvió a descolocar con la alineación, apostando por un Petrovic que parecía venir remando por detrás de Zapater y Francho desde su lesión en Cartagena. Y, sobre todo, dejando en el banquillo a Azón. Álvaro Giménez ocupó la punta de ataque y Sabin siguió fatigando sin suerte ni acierto la banda izquierda del ataque; si bien ensayó una volea zidanesca al final de la primera parte, tras centro de Gámez, y su derechazo rozó la escuadra de Whalley. De haber entrado, hubiera viajado -sin escalas- de la hoguera al altar del zaragocismo.

Quizá se este buscando que sea capaz de firmar un fogonazo de este tipo para que su fútbol -todavía invisible- se destape. Nunca se sabe qué es mejor porque, mientras esto no sucede, se diría que su figura se erosiona. Con Narváez, cuando se terminó su inicio goleador, sucedió algo parecido la campaña anterior: mientras su juego animaba a darle un descanso, JIM se empeñó en que fuera indiscutible y apenas levantó el vuelo de nuevo. Ayer el colombiano estaba sancionado y todo hace indicar que este verano sadrá de la entidad aragonesa.

Más complicado será que lo haga Merino y nadie imagina que pueda hacerlo Eugeni, aunque su estrella se ha ido apagando con la llegada de la primavera. Anoche apenas pudo influir en el juego ofensivo durante la primera parte y fue sustituido al descanso. El calor fue un factor al inicio del choque. Petrovic y Valderrama parecieron sufrirlo más que el resto y Grau no era suficiente ante un Lugo que fue gobernando el mediocampo y acumulando ataques cada vez más peligrosos, liderados por un jugador superior en esta categoría: Chris Ramos.

Cristian tuvo que ajustarse el traje de superhéroe de Oviedo para comenzar negándole un gol casi inevitable a Moyano, tras fallo grueso de Lluis López -sustituto de Jair y más incómodo en el perfil izquierdo del centro de la defensa-; y seguir con una excursión hasta el mediocampo, para cortar una contra del Lugo y terminar siendo amonestado por mano -cuando la pelota le golpeó en la pierna…- por un colegiado que se pasó el partido pitando cualquier cosa. Petrovic, mejorado en la segunda mitad, salvó un gol antes del descanso, poniéndose delante del disparo desde dentro del área de Ramos.

Bermejo trataba de conectar por dentro, Chavarría frecuentaba la línea de fondo y Álvaro Giménez se peleaba en la misma soledad de toda la temporada. El 4141 de referencia de JIM apenas junta dos delanteros en el área rival en la fase final de los ataques y, hasta ese momento, el único nueve está siempre condenado a una pelea desigual contra los centrales rivales. Quizá haber evolucionado a un 4312, aprovechando que nuestro centro del campo es fuerte por dentro y en la plantilla hay varios jugadores que se encuentran más cómodos siendo mediapuntas –Eugeni, Bermejo, Vada-, nos hubiera permitido reunir permanentemente dos delanteros arriba. Para alegría de ellos… y de todos.

El partido parecía pedir a Azón  y a Francho -para ser el pegamento necesario en el medio-, en el inicio de la segunda mitad, y terminaron entrando Azón y Vada. El canterano sustituyó a Sabin y se situó en la misma posición de atacante por izquierda, dejando la punta para Giménez. Su impacto en el juego no tardó en sentirse y sólo la fatiga acumulada por haber disputado el partido completo en Oviedo cuatro días antes es capaz de explicar su suplencia. Vada, quien ha sabido influir desde el banquillo en los dos últimos choques, pronto dinamizó el frente de ataque y el Real Zaragoza comenzó a encontrar pasillos que había tenido bloqueados hasta entonces.

Bermejo y su recién estrenado cañón en la zurda obligaron a un vuelo descomunal a Whalley, para desviar el disparo y astillar el larguero. El conjunto aragonés ya estaba inclinando el campo a su favor cuando Xavi Torrés pisó y dobló el tobillo de Fran Gámez. El VAR avisó al árbitro, quien había castigado la acción con tarjeta amarilla, y rectificó: roja. Albes reaccionó con un triple cambio y JIM hizo el que todos estábamos deseando. La Romareda se puso en pie para recibir a Lasure, quince meses después de serle diagnosticado un tumor testicular, y el lateral izquierdo cuajó una media hora final muy superior a lo previsible.

Lasure entró por Chavarría y dio la impresión de llevar jugando toda la temporada. Alicató su banda, despejó algún centro peligroso en área propia y puso varios con música, con una rosca que le sale natural y que todavía tiene muchas asistencias que dar con esta camiseta. Muchas asistencias… y algún gol, si sigue disparando como lo hizo desde la frontal del área -ya en el añadido y con 1-0 en el marcador- para obligar a Whalley a hacer su segunda gran parada de la noche. El meta aragonés aún tiene un año más de contrato en Lugo, pero anoche dejó sus credenciales para poder ser el heredero de Cristian, cuando éste dé por concluida su extensa vida laboral de milagros.

Francés se disfrazó de Fernando Hierro para cruzar un envío teledirigido, de más de 30 metros, a la carrera desbocada de Azón por banda izquierda. Iván lo recibió con el pecho y no paró hasta adentrarse en el área y casi llegar a línea de fondo. Ahí recortó hacía dentro y asistió al corte perfecto de Vada hacia el área pequeña. El argentino definió de primeras para gritar el único tanto del encuentro, igualar con Azón como máximo goleador de la plantilla esta temporada y reforzar su candidatura a seguir vistiendo esta camiseta a partir de septiembre.

Petrovic pudo marcar en un par de ocasiones desde la frontal y Puche sustituyó a un buen Bermejo. El Lugo nunca se rindió y rozó el empate en un cabezazo al larguero de Antonetti y en un disparo cruzado de Cuellar, que pareció llegar tras una falta sobre el serbio en el pico del área propia. Francho entró al partido mucho más tarde de que éste lo suplicara, para sustituir a Francés. Pensemos que fue para proteger al canterano de las leves molestias que tuvo en la previa y no para asegurarle una ovación de despedida preventiva, por si este verano termina ocurriendo lo que ninguno queremos que suceda. Quizá hubiera sido un premio para Ángel López -en lugar de Francho- y su abnegada temporada…; pero no le exijamos la plenitud en los detalles a un JIM que seguro vivió un gran desgaste emocional por saberse en su último partido en La Romareda. Él que no es persona de vendettas, merecía que su adiós en casa acabara con v de victoria. De Valentín.

REAL ZARAGOZA. Cristian Álvarez; Gámez, Francés (Francho, 88), Lluís López, Chavarría (Lasure, 64); Petrovic, Eugeni (Vada, 46), Grau; Bermejo (Puche, 81), Sabin Merino (Azón, 46); y Álvaro Giménez.

LUGO. Whalley; Campabadal (Ricard, 61), Alberto, Alende (Antonetti, 81), Lebedenko; Xavi Torres, Clavería, Señé (Juanpe, 77); Iriome (Cuéllar, 61), Moyano (Pita, 61); y Chris Ramos.

ÁRBITRO: Moreno Aragón (Comité Madrileño). Expulsó a Xavi Torres (59) por juego violento, avisado por el VAR. Amonestó a Cristian Álvarez (17), Chavarria (41), Moyano (50) y Alberto (94).

GOLES: 1-0, min. 74: Vada.

INCIDENCIAS: Partido correspondiente a la cuadragésimo primera jornada de Liga, disputado en La Romareda. 10.200 espectadores.

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